Tecnología Híbrida Flex
Tecnología Híbrida Flex – En la búsqueda de soluciones que reduzcan las emisiones de gases de efecto invernadero y mitiguen los impactos del cambio climático, la transición de motores convencionales que utilizan combustibles fósiles a opciones menos contaminantes es esencial.
Para atender esta necesidad y considerando las grandes diferencias de contextos entre los países, así como las distintas necesidades de los consumidores, la industria automotriz ha desarrollado diversas soluciones tecnológicas.
Alternativas como vehículos eléctricos, híbridos, híbridos enchufables, celdas de combustible y el uso de combustibles neutros han sido experimentadas por una amplia gama de usuarios para diferentes aplicaciones.
En Brasil y en algunos otros países, tecnologías automotrices combinadas con el uso de biocombustibles, especialmente el etanol, han ganado fuerza como respuestas realistas e inmediatas para la descarbonización.
Con casi 50 años de experiencia en el uso de biocombustibles, Brasil se ha establecido como un ejemplo global de movilidad sostenible. Todo comenzó con el Proálcool, en 1975, que contemplaba usar el etanol como combustible en respuesta a la crisis del petróleo.
Pero su uso solo fue efectivamente consolidado en 2003 con el lanzamiento de la tecnología flex, que permitió a los consumidores elegir con seguridad una alternativa de menor impacto ambiental. Y más recientemente, en 2019, una innovadora solución brasileña elevó la industria automotriz a un nuevo nivel: la tecnología híbrida flex completa.
La tecnología híbrida flex
La tecnología híbrida flex completa presenta una característica única en el mundo: una disruptiva combinación entre tecnología de electrificación y el uso de biocombustibles. Se destaca por ser muy práctica, ya que no requiere recarga eléctrica. También es muy accesible, en comparación con otras tecnologías ofrecidas en el mercado.
Y, finalmente, por ser comprobada como sostenible, ya que la combinación de la alta eficiencia de los motores eléctricos con el uso de biocombustibles disminuye sustancialmente las emisiones de CO2, alcanzando una reducción del 70% en comparación con las emisiones de un vehículo convencional abastecido con gasolina.
La tecnología híbrida flex trae consigo diversas ventajas para el país en comparación con otras tecnologías de electrificación. En primer lugar, contempla la utilización de toda la infraestructura del sector sucroalcoholero y de distribución de biocombustibles ya existente.
Además, genera más empleos en el sector de autopartes, pues permite el mantenimiento y el fortalecimiento de la cadena productiva local, con la nacionalización progresiva de componentes de tecnología avanzada.
Por último, tiene mayor probabilidad de mantener líneas de producción en el país que contemplen la totalidad de los procesos productivos de la industria, como estampado, soldadura, pintura y montaje.
En resumen, la producción de híbridos flex en el país tiene el potencial de generar mayor crecimiento del PIB, actividad económica, producción local, empleos e ingresos, con una sustancial reducción de las emisiones de CO2.
El auge de la tecnología híbrida flex en el país refleja la asimilación de este entendimiento por parte de la gran mayoría de los actores de la sociedad.
Con crecientes inversiones por parte de las automotrices instaladas aquí en productos equipados con esta tecnología, 2025 tiende a ser el año de la consolidación del híbrido flex en Brasil, contribuyendo a la sostenibilidad en todas sus dimensiones: ambiental, económica y social. El medio ambiente y las futuras generaciones de brasileños lo agradecerán.
